sábado, 3 de diciembre de 2011

XXIII

Por tus guiños, tus manías y tu forma de mirar.
Por los sitios que nos vieron, por los días que vendrán,.Por tus noches en mis manos, porque ya te tengo aquí; eso es mucho más de lo que yo jamás podía perdir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario